PRIMEROS PASOS DEL HOMBRE A LA FE
Convertíos, hijos rebeldes, dice Jehová, porque yo soy vuestro esposo: y os tomaré uno de una ciudad, y dos de una familia, y os introduciré en Sión Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; pues que vendrán los tiempos del refrigerio de la presencia del Señor. Jer. 3:14. Hch. 3:19.
Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. Y con otras muchas palabras testificaba y exhortaba, diciendo: Sed salvos de esta perversa generación. *El cual quiere que todos los hombres sean salvos, y que vengan al conocimiento de la verdad. Hch. 2:39,40. 1 Ti. 2:4.
Yo amo a los que me aman; Y me hallan los que madrugando me buscan. Porque el que me hallare, hallará la vida, Y alcanzará el favor de Jehová. Pr. 8:17, 35.
Ahora pues, hijos, oídme: Y bienaventurados los que guardaren mis caminos. Bienaventurado el hombre que me oye, Velando a mis puertas cada día, Guardando los umbrales de mis entradas. Pr. 8:32,34.
Hijo mío, guarda mis razones, Y encierra contigo mis mandamientos. Guarda mis mandamientos, y vivirás; Y mi ley como las niñas de tus ojos. Pr. 7:1,2.
Camino a la vida es guardar la corrección: Más el que deja la reprensión, yerra. El que ama la corrección ama la sabiduría: Mas el que aborrece la reprensión, es ignorante. Pr.10:17. y 12:1.
La reconvención es molesta al que deja el camino: Y el que aborreciere la corrección, morirá. El camino de la vida es hacia arriba al entendido, Para apartarse del infierno abajo. Pr. 15:10,24.
La oreja que escucha la corrección de vida, Entre los sabios morará. El que tiene en poco la disciplina, menosprecia su alma: Más el que escucha la corrección, tiene entendimiento. Pr. 15:31,32.
El entendido en la palabra, hallará el bien: Y el que confía en Jehová, él es bienaventurado. Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee: Mas la erudición de los necios es necedad. Pr. 16:20:22.
El que menosprecia la palabra, perecerá por ello: Mas el que teme el mandamiento, será recompensado. El que guarda el mandamiento, guarda su alma: Mas el que menospreciare sus caminos, morirá. Pr. 13:13. y 19:16.
Atended el consejo, y sed sabios, Y no lo menospreciéis Escucha el consejo, y recibe la corrección, Para que seas sabio en tu vejez. Pr. 8:33 y 19:20.
Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la peña; *Y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y combatieron aquella casa; y no cayó: porque estaba fundada sobre la peña. Mt. 7:24,25.
El que guarda la ley es hijo prudente: Mas el que es compañero de glotones, avergüenza a su padre. Pr. 28:7.
Y él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno sino uno, es a saber, Dios: y si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. *Si guardareis mis mandamientos, estaréis en mi amor; como yo también he guardado los mandamientos de mi Padre, y estoy en su amor. Mt.19:17. Jn. 15:10.
Si me amáis, guardad mis mandamientos; Respondió Jesús, y díjole: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos con él morada. Jn. 14:15,23.
El temor de Jehová es para vida; Y con él vivirá el hombre, lleno de reposo; No será visitado de mal. Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios. Pr. 19:23. y 2:5.
Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos. Jer. 6:16.
¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que digo? No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos: mas el que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Lc. 6:46. Mt. 7:21.
Porque no los oidores de la ley son justos para con Dios, mas los hacedores de la ley serán justificados. De manera que la ley nuestro ayo fué para llevarnos á Cristo, para que fuésemos justificados por la fe. Ro. 2:13. Ga. 3:24.
Por lo cual, dejando toda inmundicia y superfluidad de malicia, recibid con mansedumbre la palabra ingerida, la cual puede hacer salvas vuestras almas. Stg.1:21
Porque si alguno oye la palabra, y no la pone por obra, este tal es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Stg.1:23.
Mas el que hubiere mirado atentamente en la perfecta ley, que es la de la libertad, y perseverado en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, este tal será bienaventurado en su hecho. Stg.1:25.
Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas: porque el tiempo está cerca. Ap.1:3.
Y he aquí, vengo presto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro. Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, y que entren por las puertas en la ciudad. Ap. 22:7,14.
LA FE
¿Qué es la Fe? Es pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven. *No mirando nosotros a las cosas que se ven, sino a las que no se ven: porque las cosas que se ven son temporales, mas las que no se ven son eternas. He. 11:1. 2 Co. 4:18.
Empero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual también hablé: nosotros también creemos, por lo cual también hablamos. 2 Co. 4:13.
A otro, fe por el mismo Espíritu, y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. 1 Co. 12:9.
Empero antes que viniese la fe, estábamos guardados bajo la ley, encerrados para aquella fe que había de ser descubierta. Ga. 3:23.
De la cual salud los profetas que profetizaron de la gracia que había de venir a vosotros, han inquirido y diligentemente buscado. 1P. 1:10.
Escudriñando cuándo y en qué punto de tiempo significaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual prenunciaba las aflicciones que habían de venir a Cristo, y las glorias después de ellas. 1P. 1:11.
¿Cuándo el hombre hallará la verdadera Fe? El hombre hallará la verdadera Fe, cuando llegare el día grande de Jehová, manifestado a través de su Hijo Primogénito, Hijo del Hombre. A la verdad todos los hombres tenemos fe, de acuerdo a nuestro pensamiento humano, pero estos conceptos se concretarán, cuando en el hombre se declare la promesa de Dios.
Como dice en: Ef. 1:13. “En el cual esperasteis también vosotros en oyendo la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salud: en el cual también desde que creísteis, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa.” Obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salud de vuestras almas. 1P. 1:9.
Para nosotros que somos guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrimero tiempo. *En lo cual vosotros os alegráis, estando al presente un poco de tiempo afligidos en diversas tentaciones, si es necesario. 1P. 1:5,6.
Para que la prueba de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual perece, bien que sea probado con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra, cuando Jesucristo fuere manifestado: *Al cual, no habiendo visto, le amáis; en el cual creyendo, aunque al presente no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorificado. 1P. 1:7,8.
Pero, os digo cuando el Hijo del Hombre llegare a la tierra, los defenderá presto; por eso dice ahora en: Lc. 18:8. Empero cuando el Hijo del hombre viniere, ¿hallará fe en la tierra?
Empero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es menester que el que a Dios se allega, crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. He. 11:6.
Porque en él la justicia de Dios se descubre de fe en fe; como está escrito: Mas el justo vivirá por la fe. *Ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de mi espíritu sobre la casa de Israel, dice el Señor Jehová. Ro. 1:17. Ez. 39:29.
Y alzando sus ojos, vio a Israel alojado por sus tribus; y el espíritu de Dios vino sobre él. *Yo á la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; mas el que viene tras mí, más poderoso es que yo; los zapatos del cual yo no soy digno de llevar; él os bautizará en Espíritu Santo y en fuego. Nm. 24:2. Mt. 3:11.
Y yo no le conocía; mas el que me envió á bautizar con agua, aquél me dijo: Sobre quien vieres descender el Espíritu, y que reposa sobre él, éste es el que bautiza con Espíritu Santo. Jn. 1:33.
El que cree en mí, como dice la Escritura, ríos de agua viva correrán de su vientre. *(Y esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él: pues aun no había venido el Espíritu Santo; porque Jesús no estaba aún glorificado.) Jn. 7:38, 39.
Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; pues que vendrán los tiempos del refrigerio de la presencia del Señor. Hch. 3:19.
Y será en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Y vuestros mancebos verán visiones, Y vuestros viejos soñarán sueños: *Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán. Hch. 2:17, 18.
Y yo no le conocía; más para que fuese manifestado a Israel, por eso vine yo bautizando con agua. *Mas tú, Israel, siervo mío eres; tú, Jacob, a quien yo escogí, simiente de Abraham mi amigo. Jn. 1:31. Is. 41:8.
Luego la fe es por el oír; y el oír por la palabra de Dios. *Y él os anunció su pacto, el cual os mandó poner por obra, las diez palabras; y escribiólas en dos tablas de piedra. Ro. 10:17. Dt. 4:13.
Y díjome: Hijo del hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. *Díjome entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Ez. 37:3,4.
Así ha dicho el Señor Jehová a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. *Y pondré nervios sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová. Ez. 37:5,6.
Y díjome: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo del hombre, y di al espíritu: Así ha dicho el Señor Jehová: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. Ez. 37:9.
Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies, un ejército grande en extremo. Ez. 37:10.
Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios está derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado. *¿Luego deshacemos la ley por la fe? En ninguna manera; antes establecemos la ley. *Luego la fe es por el oír; y el oír por la palabra de Dios. Ro. 5:5. y 3:31. y 10:17.
Más él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. *Carísimos, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios. *Y respondiendo Jesús, les dice: Tened fe en Dios. Stg. 4:6. 1 Jn. 3:21. Mr. 11:22.
Y Jesús les dijo: Por vuestra incredulidad; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá: y se pasará: y nada os será imposible. Mt. 17:20.
Para que la bendición de Abraham fuese sobre los Gentiles en Cristo Jesús; para que por la fe recibamos la promesa del Espíritu. *JUSTIFICADOS pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. *Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios. Ga. 3:14. Ro. 5:1. Ef. 2:8.
1.- Hay que tener fe en aquel que Dios a enviado: Y respondiendo Jesús, les dice: Tened fe en Dios. Mr. 11:22. ¿Para qué tener fe? *Respondió Jesús, y díjoles: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado. Mr. 11:22. Jn. 6:29.
El que en él cree, no es condenado; más el que no cree, ya es condenado, porque no creyó en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Jn. 3:18.
Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna: y yo le resucitaré en el día postrero. *El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado. Jn. 6:40. Mr.16:16.
Y al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según la revelación del misterio encubierto desde tiempos eternos. *Más manifestado ahora, y por las Escrituras de los profetas, según el mandamiento del Dios eterno, declarado a todas las gentes para que obedezcan a la fe. Ro. 16:25,26.
Para que la prueba de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual perece, bien que sea probado con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra, cuando Jesucristo fuere manifestado. 1 P. 1:7.
Al cual, no habiendo visto, le amáis; en el cual creyendo, aunque al presente no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorificado; *Obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salud de vuestras almas. 1 P. 1:8,9.
2.-Por fe adquirimos el conocimiento de Dios: Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la edad de la plenitud de Cristo. Ef. 4:13.
Y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salud por la fe que es en Cristo Jesús. 2 Ti. 3:15.
Retén la forma de las sanas palabras que de mi oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús. *No defraudando, antes mostrando toda buena lealtad, para que adornen en todo la doctrina de nuestro Salvador Dios. 2 Ti. 1:13. Tito 2:10.
Para que vuestra fe no esté fundada en sabiduría de hombres, más en poder de Dios. *Empero hablamos sabiduría de Dios entre perfectos; y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo, que se deshacen. 1 Co. 2:5,6.
Más hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria. 1 Co. 2:7.
Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, demándela a Dios, el cual da a todos abundantemente, y no zahiere; y le será dada. *Pero pida en fe, no dudando nada: porque el que duda es semejante a la onda de la mar, que es movida del viento, y echada de una parte a otra. Stg. 1:5,6.
3.- Abraham por fe es heredero de la promesa: Por fe ofreció Abraham a Isaac cuando fué probado, y ofrecía al unigénito el que había recibido las promesas. He. 11:17.
Por tanto es por la fe, para que sea por gracia; para que la promesa sea firme a toda simiente, no solamente al que es de la ley, mas también al que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros. Ro. 4:16.
(Como está escrito: Que por padre de muchas gentes te he puesto) delante de Dios, al cual creyó; el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como las que son. Ro. 4:17.
Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir por heredad; y salió sin saber dónde iba. *Por fe habitó en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en cabañas con Isaac y Jacob, herederos juntamente de la misma promesa. He. 11:8,9.
La promesa de Dios a Abraham: Empero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré; *Y haré de ti una nación grande, y bendecirte he, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición: Gn. 12:1,2.
Y bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré: y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Gn. 12:3.
Para que la bendición de Abraham fuese sobre los Gentiles en Cristo Jesús; para que por la fe recibamos la promesa del Espíritu. Ga. 3:14.
4.- La fe y las obras: Hermanos míos, ¿qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? *Así también la fe, si no tuviere obras, es muerta en sí misma. Stg. 2:14,17.
Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras: muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras. *Tú crees que Dios es uno; bien haces: también los demonios creen, y tiemblan. Stg. 2:18,19.
¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta? *¿No fué justificado por las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? *¿No ves que la fe obró con sus obras, y que la fe fué perfecta por las obras. Stg. 2:20, 21, 22.
Y fué cumplida la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fué imputado a justicia, y fué llamado amigo de Dios. *Vosotros veis, pues, que el hombre es justificado por las obras, y no solamente por la fe. Stg. 2:23,24.
Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras es muerta. Stg. 2:26.
5.- La justicia es por la fe: Por fe ofreció Abraham a Isaac cuando fué probado, y ofrecía al unigénito el que había recibido las promesas, *Habiéndole sido dicho: En Isaac te será llamada simiente. He. 11:17,18.
Y fué cumplida la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fué imputado a justicia, y fué llamado amigo de Dios. Stg. 2:23.
Por la fe Noé, habiendo recibido respuesta de cosas que aun no se veían, con temor aparejó el arca en que su casa se salvase: por la cual fe condenó al mundo, y fué hecho heredero de la justicia que es por la fe. He. 11:7.
6.- Justificados por la fe: JUSTIFICADOS pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. Ro. 5:1.
Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para que fuésemos justificados por la fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada. Ga. 2:16.
La verdad hay que decir, en esta generación presente no hay nadie que pueda justificarse por las obras de la ley, porque nadie cumple lo que dice la ley de Dios, pues ahora a llegado el tiempo determinado para cumplir las palabras de Dios, que son los Diez Mandamientos, las Palabras del Pacto de la Ley.
Para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, remisión de pecados y suerte entre los santificados. Hch. 26:18.
De hoy adelante no habrá ninguna diferencia de persona a persona, porque todos estamos llamados a cumplir la ley de Dios, sean Judíos, Griegos y Gentiles: “Empero a los llamados, así Judíos como Griegos, Cristo potencia de Dios, y sabiduría de Dios.” 1 Co. 1:24.
Testificando a los Judíos y a los Gentiles arrepentimiento para con Dios, y la fe en nuestro Señor Jesucristo. *Y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando con la fe sus corazones. Hch. 20:21. y 15:9.
7.- No obedecieron a la fe: ¿Y de quién te asustaste y temiste, que has faltado a la fe, y no te has acordado de mí, ni te vino al pensamiento? ¿No he yo disimulado desde tiempos antiguos, y nunca me has temido? *Yo publicaré tu justicia y tus obras, que no te aprovecharán. Is. 57:11,12.
Mas le lisonjeaban con su boca, Y con su lengua le mentían: *Pues sus corazones no eran rectos con él, Ni estuvieron firmes en su pacto. Sal. 78:36,37.
8.- Por esta causa nuestro Dios está contra nosotros, por eso dice: Condenadas ya, por haber falseado la primera fe. 1 Ti. 5:12. Por otro lado también dice: Pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor. Ap. 2:4.
Y si alguno no tiene cuidado de los suyos, y mayormente de los de su casa, la fe negó, y es peor que un infiel. 1 Ti. 5:8.
Por tanto, si trajeres tu presente al altar, y allí te acordares de que tú hermano tiene algo contra ti. Mt. 5:23.
¿Y quién es nuestro hermano? Y envió Moisés embajadores al rey de Edom desde Cades: Así dice Israel tu hermano: Tú has sabido todo el trabajo que nos ha venido. Nm. 20:14.
Entonces Jesús le dijo: Mira, no lo digas a nadie; mas ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece el presente que mandó Moisés, para testimonio a ellos. Mt. 8:4.
¿Y qué debemos hacer para que nuestras oraciones y sacrificios sean aceptos delante de nuestro Dios? Deja allí tu presente delante del altar, y vete, vuelve primero en amistad con tu hermano, y entonces ven y ofrece tu presente. Mt. 5:24.
Concíliate con tu adversario presto, entre tanto que estás con él en el camino; porque no acontezca que el adversario te entregue al juez, y el juez te entregue al alguacil, y seas echado en prisión. Mt. 5:25.
Recuerda por tanto de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré presto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. Ap. 2:5.
9.- ¿Por qué el Israel antiguo no alcanzó la justicia de Dios? ¿Pues qué diremos? Que los Gentiles que no seguían justicia, han alcanzado la justicia, es a saber, la justicia que es por la fe; *Mas Israel que seguía la ley de justicia, no ha llegado a la ley de justicia. Ro. 9:30,31.
¿Por qué? Porque la seguían no por fe, mas como por las obras de la ley: por lo cual tropezaron en la piedra de tropiezo, *Como está escrito: He aquí pongo en Sión piedra de tropiezo, y piedra de caída; Y aquel que creyere en ella, no será avergonzado. Ro. 9:32,33.
Y dijo: Esconderé de ellos mi rostro, Veré cuál será su postrimería: Que son generación de perversidades, Hijos sin fe. *Ellos me movieron a celos con lo que no es Dios; Hiciéronme ensañar con sus vanidades: Yo también los moveré a celos con un pueblo que no es pueblo, Con gente insensata los haré ensañar. Dt. 32:20,21.
Ahora el Apóstol Pablo vuelve ratificar y dice: Más digo: ¿No ha conocido esto Israel? Primeramente Moisés dice: Yo provocaré a celos con gente que no es mía; Con gente insensata os provocaré a ira. Ro. 10:19.
Digo pues: ¿Han tropezado para que cayese? En ninguna manera; más por el tropiezo de ellos vino la salud a los Gentiles, para que fuesen provocados a celos. Ro. 11:11.
Porque todo aquello que es nacido de Dios vence al mundo: y esta es la victoria que vence al mundo, nuestra fe. *¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios? 1 Jn. 5:4,5.
Porque cualquiera que haya vencido al adversario ya no mandará mas carga: Pero yo digo a vosotros, y a los demás que estáis en Tiatira, cualesquiera que no tienen esta doctrina, y que no han conocido las profundidades de Satanás, como dicen: Yo no enviaré sobre vosotros otra carga. Ap. 2:24.
10.- ¿El hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley? ¿Dónde pues está la jactancia? Es excluida. ¿Por cuál ley? ¿De las obras? No; más por la ley de la fe. Ro. 3:27.
Así que, concluimos ser el hombre justificado por fe sin las obras de la ley. *¿Es Dios solamente Dios de los Judíos? ¿No es también Dios de los Gentiles? Cierto, también de los Gentiles. Ro. 3:28,29.
Porque uno es Dios, el cual justificará por la fe la circuncisión, y por medio de la fe la incircuncisión. *¿Luego deshacemos la ley por la fe? En ninguna manera; antes establecemos la ley. Ro. 3:30,31.
Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios. *Por tanto es por la fe, para que sea por gracia; para que la promesa sea firme a toda simiente, no solamente al que es de la ley, mas también al que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros. Ef. 2:8. Ro. 4:16.
Sobre todo, tomando el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. *Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos. *Todas vuestras cosas sean hechas con caridad. Ef. 6:16. 1 Co. 16:13,14.
MEDIANTE LA FE, LA PERFECCION
Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, mostrad en vuestra fe virtud, y en la virtud ciencia. 2º P.1:5.
Y en la ciencia templanza, y en la templanza paciencia, y en la paciencia temor de Dios. Y en el temor de Dios, amor fraternal, y en el amor fraternal caridad. 2º P.1:6,7.
Porque si en vosotros hay estas cosas, y abundan, no os dejarán estar ociosos, ni estériles en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. 2° P. 1:8.
PERFECCIONAMIENTO
Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos: y si otra cosa sentís, esto también os revelará Dios. *Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto. Fil. 3:15. Mt. 5:48.
El cual nosotros anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando en toda sabiduría, para que presentemos a todo hombre perfecto en Cristo Jesús. Col. 1:28.
Más tenga la paciencia perfecta su obra, para que seáis perfectos y cabales, sin faltar en alguna cosa. *Porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, que también puede con freno gobernar todo el cuerpo. Stg. 1:4. y 3:2.
Empero hablamos sabiduría de Dios entre perfectos; y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo, que se deshacen: *Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria. 1 Co. 2:6,7.
Y para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio; *Y para enseñar a los hijos de Israel todos los estatutos que Jehová les ha dicho por medio de Moisés. Lv. 10:10,11.
Para hacer diferencia entre inmundo y limpio, y entre los animales que se pueden comer y los animales que no se pueden comer. Lv. 11:47.
Que prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de las viandas que Dios crió para que con hacimiento de gracias participasen de ellas los fieles, y los que han conocido la verdad. 1 Ti. 4:3.
Mas la vianda firme es para los perfectos, para los que por la costumbre tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal. He. 5:14.
¿Luego deshacemos la ley por la fe? En ninguna manera; antes establecemos la ley. *Porque de cierto os digo, que hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota ni un tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas. Ro. 3:31. Mt. 5:18.
REQUISITOS PARA ADQUIRIR SABIDURÍA
Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, demándela a Dios, el cual da a todos abundantemente, y no zahiere; y le será dada. Stg. 1:5.
Pero pida en fe, no dudando nada: porque el que duda es semejante a la onda de la mar, que es movida del viento, y echada de una parte a otra. * No piense pues el tal hombre que recibirá ninguna cosa del Señor. Stg. 1:6,7.
Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. *Porque cualquiera que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se abrirá. Mt. 7:7,8.
Yo amo a los que me aman; Y me hallan los que madrugando me buscan. *Por eso pues ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y llanto. Pr. 8:17. Joel 2:12.
Y lacerad vuestro corazón, y no vuestros vestidos; y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira, y grande en misericordia, y que se arrepiente del castigo. Joel 2:13.
SIGUE LA CARIDAD
Y ahora permanecen la fe, la esperanza, y la caridad, estas tres: empero la mayor de ellas es la caridad. *La caridad no hace mal al prójimo: así que, el cumplimento de la ley es la caridad. 1º Co.13:13. Ro.13: 10.
Pues el fin del mandamiento es la caridad nacida de corazón limpio, y de buena conciencia, y de fe no fingida. *Huye también los deseos juveniles; y sigue la justicia, la fe, la caridad, la paz, con los que invocan al Señor de puro corazón. 1º Ti.1:5. 2º Ti. 2:22.
La caridad es sufrida, es benigna; la caridad no tiene envidia, la caridad no hace sinrazón, no se ensancha. No es injuriosa, no busca lo suyo, no se irrita, no piensa el mal. 1º Co. 13:4,5.
Porque por esto también ha sido predicado el evangelio a los muertos; para que sean juzgados en carne según los hombres, y vivan en espíritu según Dios. *Mas el fin de todas las cosas se acerca: sed pues templados, y velad en oración. 1 P. 4:6,7.
Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo. 2 Ti. 2:19.
Porque si en vosotros no hay preparación para ser buen obrero o buen predicador, no pueden ser obreros ni pueden predicar, como esta escrito. Conforme líneas arriba ya mencionado; si no hay preparación para ser buen obrero o buen predicador; no pueden ser obreros cuando hay iniquidad en el corazón, ni pueden predicar, como esta escrito:
Porque si en vosotros hay estas cosas, y abundan, no os dejarán estar ociosos, ni estériles en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. *Mas el que no tiene estas cosas, es ciego, y tiene la vista muy corta, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados. *Por lo cual, hermanos, procurad tanto más de hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. 2º P.1:8, 9, 10.
Seguid la caridad; y procurad los dones espirituales, mas sobre todo que profeticéis. Así también vosotros; pues que anheláis espirituales dones, procurad ser excelentes para la edificación de la iglesia. 1º Co.14:1,12
¿Cuál, pues, es mi merced? Que predicando el evangelio, ponga el evangelio de Cristo de balde, para no usar mal de mi potestad en el evangelio. Y sobre todo, tened entre vosotros ferviente caridad; porque la caridad cubrirá multitud de pecados. 1º Co. 9:18. 1º P. 4:8.
Alaben el nombre de Jehová, Porque sólo su nombre es elevado; Su gloria es sobre tierra y cielos. *El ensalzó el cuerno de su pueblo; Alábenle todos sus santos, los hijos de Israel, El pueblo a él cercano. Aleluya. Sal. 148:13,14.
Dichoso el que tú escogieres, e hicieres llegar a ti, Para que habite en tus atrios: Seremos saciados del bien de tu casa, De tu santo templo. Sal. 65:4.
SACADA DEL LIBRO "ESTUDIOS BIBLICOS SELECTOS"
por el EXCELENTÍSIMO MAESTRO EZEQUIEL ATAUCUSI GAMONAL
VARÓN DE DIOS
FUNDADOR, COMPILADOR Y MISIONERO GENERAL DE LA AEMINPU
1999